Natalia Richart

Mi nombre es Natalia Richart, trabajo como auxiliar veterinaria en la Sociedad Protectora de Animales de Villena (Alicante), soy de Villena y antes de trabajar con Marga me sentía agotada física y sobre todo mentalmente todos los días de mi vida. Me costaba empezar el día y mucho más terminarlo. Me iba arrastrando. Me costaba hacer las tareas más básicas, incluso tenía que pasar muchos días en cama porque me sentía sin fuerzas. Mi cabeza iba a mucho más que a veinte mil revoluciones por minuto. No conseguía dormir sin medicarme. Incluso medicándome dormía pero sentía que no descansaba, que me levantaba peor que me había acostado. Los médicos no sabían cuál era mi problema, algunos decían que fatiga crónica, otros que burn out y otros que intolerancia al esfuerzo físico. El caso era que yo cada día estaba peor, el agotamiento me hacía sentir ansiedad y la ansiedad no me dejaba dormir, me costaba pensar y cualquier tarea se me hacía un mundo y si a eso le sumabas cualquier problema extra que me pudiera surgir o la regla, ya me sentía inútil. Mi objetivo en ese momento era recuperar mi calidad de vida y poder recuperar algo de energía que me permitiera poder tener una vida normal. 

Cuando empecé a trabajar con Marga, me explicó que mi problema era la exigencia, que a pesar de lo mal que me encontraba yo seguía exigiéndome, lo cual afectaba a mi sistema muculoesquelético y no dejaba a mi cuerpo ni a mi mente autosanarse ni autorepararse. Después de 8 sesiones de hipnosis, salvo en alguna ocasión puntual como pueda ser un sobreesfuerzo, los días de regla, los días de mayor estrés y cantidad de trabajo, puedo decir que he recuperado muchas fuerzas, paso el día bien, sin hacer un esfuerzo sobrehumano por llevar el día, tengo mucha más claridad mental, me concentro mejor en el trabajo y puedo leer y pensar. Realizo mis tareas del día a día sin problema.

Todavía no puedo hacer muchos esfuerzos físicos, pero la fatiga ha desaparecido casi en su totalidad y además cuando me siento mal me permito descansar y en poco tiempo me siento mucho mejor. Creo que aún me queda trabajo por delante para llegar a estar al cien por cien de energía, pero puedo decir que he recuperado mi calidad de vida y puedo tener una vida normal sin pasar tanto tiempo en cama o con dolores o agotada, lo cual llegaba hasta el punto de que muchos días no tenía ganas de vivir porque no había forma de encontrarme ni medio bien. Después del proceso, sé que ahora solo queda seguir mejorando, que ya nunca más me voy a sentir así de mal ni de postrada y que poco a poco ya puedo ir poniéndome objetivos de nuevo que sean alcanzables para mí sin llegar otra vez a esa sobresaturación.

Sé que ahora es mucho más importante mi salud, mi descanso y mi bienestar que cualquier tarea, cualquier obligación, cualquier compromiso o cualquier trabajo y que siempre he de ponerla por delante por mucho que quiera ser productiva o hacer muchas cosas. No se puede conseguir nada sin salud ni energías.

Si alguien se siente identificado con mi historia le recomendaría que se pusiera en manos de Marga y su equipo para empezar a trabajar cuanto antes, independientemente de cualquier otra terapia o tratamiento. Te sorprenderán los beneficios a corto plazo y lo más importante es que el problema no se repetirá a largo plazo con tu nueva y actualizada programación mental. Lo recomiendo totalmente.

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